martes, noviembre 22, 2005
Del calor agobiante y mis neuronas fritas
Wet


Además de odiar los Lunes, como es ya de público conocimiento, odio el calor.
No me malinterpreten, como a cualquier persona más o menos cuerda (tampoco pretendan demasiado), me encanta tomar solcito (sin exagerar, ejem... Mafucha), disfrutar del mar o de una pileta (hoy y con este calor, con una manguera en la terraza agarro viaje igual).
Pero no aguanto esa sensación de quedar adherida al pavimento de Buenos Aires en cada esquina.
Me derrito.
Me deshidrato.
Se acuerdan de aquello de:
- "Poderes de los Gemelos Fantásticos, actívense! En forma de Bloque de Hielo!."
Sí, sí, sí. Eso justamente es lo que necesitaría en este momento.
O sino, al Hombre de la Barra de Hielo, el de Titanes en el Ring, para que vaya caminando conmigo por la calle mientras me va refrescando la espalduchi y la capocha con agüita helada!
Más de un Asiduo Conspirador (aún en su más tierna pubertad) estará rascándose la cabeza y preguntándose:
- "De qué carajo está hablando esta loca?"
Pero, el resto (Los Sospechosos de Siempre, ustedes saben quiénes son!) no se hagan los pendejos porque no les cuadra.
Aquí la única que entró en la tercera década NO soy yo. La mayoría "Superó Ampliamente los Objetivos" hace rato, eh?
No daba más!! Tenía que sublimar en algún lado (Chocolatín, você me entiende, verdát?)
Mentirme a mí misma para afrontar esta olla a presión que es la ciudad en estos días.
Así que ahora, luego de haber hecho público mi fastidio, a sufrir!
No puedo con mi lado masoquista.
Pero antes, ahhhh, sí, sí.... DUCHITA FRIAAAA!!
Ta luegooooo...
Soap

Hey, alguien vio el jabón?
Que lo tiró, me lo chorearon!
Ya no se puede confiar en nadie, caracho!

 
Elucubró Cruella De Vil el 11/22/2005 10:49:00 a. m. | Permalink |


13 Dejaron sus dosis de veneno...